lunes, 30 de septiembre de 2013

Las cotizadas ganan atractivo entre los inversores institucionales

Publicado en El País / Cinco Días
PABLO PICO RADA / 30 de septiembre de 2013
http://cincodias.com/cincodias/2013/09/27/empresas/1380304009_931102.html

Los fondos dan estabilidad y continuidad a los proyectos empresariales. España vuelve a ser atractiva para el capital internacional. Unas 9.000 instituciones invierten en las empresas del Ibex.

Los fondos internacionales han vuelto sus ojos hacia España. El segundo semestre del año ha marcado un punto de inflexión para decenas de instituciones extranjeras que encuentran numerosas oportunidades de inversión en el país. Las inversiones se centran en el sector inmobiliario, con la adquisición de inmuebles, oficinas o empresas inmobiliarias, marcadas por la constitución del Sareb y los bajos precios derivados de los escombros del ladrillo, pero también han vuelto a apostar por participaciones en empresas del Ibex 35.

A raíz de la crisis económica y de deuda europea, el peso de los inversores institucionales en las grandes empresas españolas cotizadas se había reducido en los últimos años. Sin embargo, desde el verano la tendencia parece haberse invertido. “España es hoy una oportunidad de inversión en el mundo”, explica Domingo García Coto, director del servicio de estudios de BME. Además, “no hay razón para pensar en un cambio brusco, la inversión institucional continuará siendo importante y evolucionará al alza en los próximos meses”, concluye Coto.
Sin los fondos institucionales no podrían existir los mercados de capitales
“Durante el año 2011 y parte de 2012, la inversión extranjera sufrió mucho,la marca España no pasaba por sus mejores momentos”, expone Ángel Martínez-Aldama, director del Observatorio InvercoPero desde septiembre, la intervención de Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE), diciendo que estaba dispuesto a hacer todo lo necesario para salvar al euro, junto a una mejora de los datos macro en España, calmaron las aguas de la eurozona y de España en particular. La prima de riesgo mejoró de forma notable desde los más de 600 puntos que tocó en julio del año pasado, y todo ello, según Martínez-Aldama, “ha supuesto un acicate entre los inversores institucionales extranjeros para tomar parte en distintas inversiones en España”.

El anuncio de Mario Draghi puso fin a una fuga de capitales en Europa que entre 2011 y agosto de 2012 había sumado más de 700.000 millones de euros, y entre septiembre y diciembre del pasado año, unos 100.000 millones regresaron a la periferia de la eurozona. Con el tiempo, la situación se ha estabilizado y los inversores han vuelto a apuntar a España. Según Martínez-Aldama, “la mejora a nivel institucional en relación a hace apenas 15 meses es innegable”. El mercado español vuelve a resultar atractivo.

Mejora de percepción
De esa mejora del riesgo y la percepción del país se han beneficiado las compañías cotizadas. Tal y como reza un informe de BME del mes de agosto, hasta 9.000 fondos mundiales están presentes en las compañías del Ibex 35. Dicho informe resalta que los principales inversores institucionales del mundo cuentan en sus carteras con participaciones en las grandes empresas cotizadas por valor de 72.000 millones de euros, según datos proporcionados por FactSet de mayo de 2013. Los inversores institucionales estadounidenses son los mayores propietarios de acciones del Ibex 35 por valor de 20.729 millones de euros a través de 1.205 fondos. Europa (67%) y Norteamérica (35%) concentran la participación institucional en empresas del selectivo madrileño.

Fuentes de Red Eléctrica inciden en ese cambio de tendencia por parte de los inversores respecto al país y sus beneficios. “La creciente presencia de inversores institucionales en el accionariado de las empresas cotizadas españolas es una realidad muy positiva para la economía española, dado que son organizaciones que analizan detalladamente las empresas en las que invierten. Ello demuestra la confianza que tienen en las empresas españolas”. Asimismo, desde Red Eléctrica, en la que un 70% del total del capital está en manos de inversores institucionales extranjeros, han observado “una entrada importante de inversión institucional extranjera en los mercados de capitales de España, con un elevado activismo accionarial que no existía en el pasado”.
Los inversores de EE UU son dueños de 21.000 millones de euros en acciones de la Bolsa española
Los inversores parecen volver la vista a las cotizadas nacionales y de nuevo atienden a los fundamentales de las compañías, dejando atrás las ventas indiscriminadas movidas por el pánico bursátil. Los fondos de inversión cotizados o ETF están tomando cada vez más participación en las acciones del Ibex. Según el informe de BME, Indra es la compañía con mayor participación individual de un fondo en su capital, un 10%, por 170 millones de euros. En términos de valor sobre la participación, destacan Banco Santander, con 1.277 millones de euros, un 2,2% del capital del banco, y Telefónica, con 1.105 millones y un 2,1% del capital. Les siguen BBVA, Inditex, Iberdrola y Repsol.

Firmino Morgado, gestor del fondo Iberia dela casa Fidelity, reconoce en España importantes oportunidades de inversión. Así, tras “la espectacular consolidación del sector bancario, entidades como Santander, BBVA, Caixabank o Bankinter están entre mis cinco primeras posiciones, pues están bien gestionadas, tienen balances saneados y también se hallan a unos precios muy atractivos”.

Pero, como resalta García Coto, debemos distinguir entre inversores institucionales nacionales y extranjeros. “Falta inversión institucional doméstica en renta variable. Entre los fondos españoles, la participación en empresas cotizadas es pequeña. Según datos de propiedad de acciones, apenas llega al 5,4% –5.047 millones de euros, según las cifras del informe de BME–, un nivel muy bajo en relación a otros mercados. Por el contrario, la participación de los institucionales extranjeros se encuentra en máximos y es bastante estable, poseen entre el 39% y 40% del capital de las cotizadas, en buena parte a través de esos más de 9.000 fondos mundiales”, remarca Coto.

Pero ¿qué papel desempeñan estos inversores y fondos en las cotizadas? Nuria Pascual, directora financiera y de relaciones con inversores de Grifols, indica que la presencia de estos fondos en las compañías españolas es, ante todo, necesaria. “Sin fondos institucionales no podrían existir los mercados de capitales. Hay que tener en cuenta que hay fondos con vocación de permanencia a largo plazo y los hay más cortoplacistas, y como tal hay que gestionarlo”.

Su presencia permite, según Pascual, “dar estabilidad y continuidad a proyectos empresariales. En nuestro caso hemos contado y contamos con fondos de todo tipo que suscriben tanto acciones ordinarias con derecho de voto y otros que suscriben acciones sin derechos políticos”. Para García Coto, “la entrada de inversores institucionales en el capital de las empresas españolas en los últimos 25 años ha sido clave en el proceso de expansión internacional que han llevado a cabo”. 

Desde Red Eléctrica esgrimen que “actualmente los grandes fondos de inversión extranjeros intentan involucrarse cada vez más en la supervisión de la gestión de las empresas en las que invierten”. Según García Coto, la inversión institucional del exterior se está yendo “a las empresas más grandes, pues son valores muy líquidos en los que poder tomar y deshacer posiciones, pero se están analizando todo tipo de oportunidades. Se ha generalizado el interés por otros activos españoles, que se materializará más tarde”. 

Pascual matiza que “en nuestro caso no hemos visto una reducción del peso de fondos institucionales. Nosotros siempre hemos tenido fondos, principalmente internacionales, en nuestro accionariado”. Y considera que, respecto a la tendencia futura, esperan que “en líneas generales, España genere confianza y emita señales positivas al mercado para que determinados fondos se planteen ponderar más su exposición".

Los analistas de las grandes gestoras apuestan por un reequilibrio en las carteras de los principales inversores institucionales desde la renta fija a la variable.